¿Sabía usted que la bola de nieve es una invención vienesa? Fue el abuelo de Erwin Perzy III quien, mientras hacía un experimento, dio con este efecto de forma casual, dando así origen a la primera bola de nieve vienesa en el año 1900. El secreto del arte de la nieve es, lógicamente, un secreto de familia muy bien guardado.
Actualmente, Erwin Perzy III es la tercera generación que vela por que la nieve continúe cayendo sobre la catedral de San Esteban, el palacio de Schönbrunn y la Noria Gigante. Tanto la fábrica de bolas de nieve de Viena como el museo se encuentran en las antiguas casas de la periferia, en Hernals, uno de los distritos del extrarradio de la ciudad. Aquí se producen y se distribuyen anualmente a clientes de todo el mundo cerca de 200 000 piezas.
Y no es poco frecuente que se hagan encargos. ¿La familia Obama, incluyendo su "Perro Presidencial" Bo en una bola de nieve para como regalo al antiguo presidente de los EE. UU.? No es ningún problema para Erwin Perzy III. Con algo de suerte, alguien se habrá tomado la molestia de explicarle a los Obama cómo hacer que nieve en la bola: no hay que sacudirla, sino darle la vuelta y luego volver a girarla. Con eso, la nevada está garantizada.